lunes, 20 de abril de 2015

Queridos ciclistas, vosotros no sois la solución

Hoy, el día después del Día Mundial de la Bicicleta, tenemos malas noticias para vosotras, personas que festejáis la bici: vosotras no sois la solución. Tampoco se puede decir que seáis parte del problema, exactamente, aunque colaboráis con vuestra inocencia en el mantenimiento del mismo. Colaboráis cuando os miráis al ombligo y obviáis al resto del mundo, colaboráis cuando creéis que vuestra sola presencia basta para cambiarlo, colaboráis cuando presuponéis que algo cambia si tú cambias. Y eso no es así, o, al menos, eso no es suficiente.

El día que no haya que celebrar el Día Mundial de la Bicicleta será el verdadero día de la bicicleta, ese en el que la bicicleta sea normal, tanto como lo es hoy en día una lavadora, el televisor, el teléfono móvil o el coche (¿alguien se imagina celebrar el día del coche?), y, con el paso que llevamos, nos va a costar mucho llegar a ese día o, quizá, va a ser imposible si no cambiamos de rumbo.


No, amigos y amigas de las bicicletas, vosotros no podéis cambiar el mundo solos y, si no se producen acontecimientos de mayor dimensión o no se trabaja en supuestos en otra dirección a lo único a lo que podéis aspirar es a ser un invitado molesto en las calles de los demás. Sentimos ser tan aguafiestas, pero más vale ser sinceros que seguir alimentando ilusiones inconsistentes y sueños inalcanzables.

No va a ser suficiente con que ganéis más adeptos, por más convencidos que estos estén, no va a ser suficiente con que logréis que os hagan algunos carriles bici más, o muchos, no va a ser suficiente con que insistáis en enseñar a la gente a andar en bici por la calzada, no va a ser suficiente con que os declaréis insumisos y circuléis por las aceras. Vais a seguir siendo una minoría y os van a seguir tratando como algo marginal.

Mientras no cuestionemos y reduzcamos drásticamente el uso del coche privado y su tiranía, todo lo demás va a ser insuficiente. No hay más. Nos pongamos lo dignos que nos pongamos, hagamos las declaraciones que se nos ocurran, expliquemos por activa y por pasiva las bonanzas de nuestra opción o salgamos una y otra vez a la calle a demostrar que somos un pelotón.

Si no cambiamos las reglas de este juego, si no replanteamos el uso de la calle, si no cambiamos el rumbo de la ordenación del territorio, de la dispersión de los usos, de la zonificación de los actividades, lo nuestro va a ser puro onanismo, buen rollo autocomplaciente, y poco más.

Perdón por interrumpir la resaca de la fiesta.

10 comentarios:

  1. No se, Eneko, estoy de acuerdo en que el dia de la bicicleta, la tierra, el euskera, o lo que quieras no vale más que para limpiar la conciencia de algunos y justificar el hacer lo contrario duranto el resto del año. Otra cosa es decir que los ciclistas actuales no son parte de la solución. Quizas no serán tan importantes como algunos creen, pero no crees que las generaciones futuras verán la bici como algo natural si sus padres la utilizan habitualmente ?



    Lo que si creo es que desafortunadamente, dependemos demasiado de la voluntad y visión de futuro del político de turno. Que la gente en pocas ocasiones es capaz de ver mas allá de sus narices. A veces solo se necesita plantar una semilla como hizo Jose Angel Cuerda en Vitoria o la coalición PSOE-IU en Sevilla. En San Sebastian fue Odon Elorza el que dio un impulso a la bici. No digo que estas ciudades hayan llegado al nirvana ciclista pero son ejemplos de como los politicos son los que deciden al final. Quizas un relevo en el ayuntamiento de Pamplona podria cambiar las cosas.

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  2. Si usar una bicicleta para movilizarse, y pensar que lo hacen por motivos ecológicos, están equivocados porque también contamina, la mayoría de los repuestos que se fabrican para hacer una bici produce contaminación ambiental, ahora si se usa con fines de bienestar, para mantenerse con buen estado físico, para mejorar los niveles de stress es perfecta,

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    1. Generalizando un poco no hay nada que "no contamine", por motivos ambientales se elige la opción menos impactante. Siguiendo con el ejemplo: ¿que tiene más impacto fabricar un coche o fabricar una bici?. Simplificando un poco el razonamiento sigue está línea. Desde este punto de vista no es una equivocación decir que la bicicleta es "menos contaminante" que otro tipo de movilidad.

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    2. Menos impacto ambiental tiene fabricar un par de zapatos o, incluso, un par de botas. Pero ya se sabe, las botas son para caminar, que es el "modo de transporte" más económico, natural, sostenible, ecológico, saludable.,... además de un excelente método para mantener el estado físico y de convivencia cívica. A fin de cuentas, la bicicleta no es más que una máquina, más próxima al denostado coche que al sufrido peatón que os tiene que soportar (o no).

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  3. Tan sólo existe quizás un onanismo mayor que el celebrado por multitudes: el ejercido sobre ellas. Por ejemplo desde los púlpitos, del tipo que sean.

    ¿Qué propone su eminencia para cambiar las reglas del juego, a no ser el ejercicio consciente y cotidiano de la responsabilidad en lo pequeño, para ser mejores ciclistas y por tanto más activos, conscientes y exigentes ciudadanos? ¿Conseguirá esto parar el TTIP, por ejemplo? Seguramente no, pero ello no implica necesariamente ser ingenuos o ilusos. Lo esencial es invisible a los ojos, los cambios más poderosos son los que no se ven a simple vista. ¿Cómo ejercer presión para los cambios arriba a no ser por la presencia diaria de una base social cada vez más amplia que tire de los cambios hasta que se generalicen y se conviertan en mayoría?

    Un abrazo desde La Rioja, Eneko, valoramos mucho tus impresiones y puntos de vista.

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  4. Dentro de todos los colectivos que luchan por el cambio, de cualquier índole, hay dos tipos de personas. Los posibilistas, que intentan cambiar las cosas de forma práctica, poco a poco. Estas personas son conscientes del inmenso poder del enemigo y optan por conseguir pequeñas victorias a costa de dejar un poco de lado la utopía y el escenario maravilloso que, evidentemente, estarían encantados de viivir. Y por otro lado están las personas que se dedican a teorizar sobre LA SOLUCIÓN TOTAL y que, por supuesto, critican todo lo que no sea ese maravilloso y perfecto escenario que está en su imaginario. Lo siento mucho Eneko pero tú perteneces a este último grupo.

    ¿Y sabes qué? Cuantas más bicis, más cultura de bici, más políticos en bici y más gente afín que puede tomar decisiones. ¿De verdad crees que eso no es así? Cuantos más seamos, más podeerosos seremos y más presión podremos ejercer. Yo no he celebrado el día de la bici, me parece una chorrada, pero ¿Cómo no me voy a alegrar de que haya más bicis en las calles? ¿Por qué voy a pensar que no es parte de la solución?

    En fin Eneko, está muy bien no mirarse el ombligo y ser conscientes de que queda muchísimo por hacer, pero lo tuyo es ya un ataque sinsentido a todo lo que sea bici y no te parezca la más vanguardista de las teorías sobre reordenación urbana y zonificación de actividades. Todo eso está genial, pero hay que conseguirlo poco a poco. Los que no tenemos coche y vivimos, trabajamos y tenemos el ocio en el mismo sitio somos parte del cambio.

    Y por Dios, no le habléis de Sevilla, que le sale humo por la cabeza.

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    1. Ja, ja, ja. To er mundo e güeno. La próxima vez, firma tu comentario.

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  5. Y por cierto, hablas de VOSOTROS los ciclistas. Ya veo que tú no eres uno de ellos...

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  6. No es que este mal, es que no es suficiente. Para que la bicicleta sea una alternativa al coche y no sea minoritaria, hay que putear al coche mas de lo que se hace (si es que se le putea algo). Y dudo que en este pais se vaya a hacer en serio con lo que significa la industria del automóvil.

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  7. Pienso que los mas rescatable del texto, ciertamente, es el ultimo párrafo. Habrá que empezar por ahí. El resto me parece una critica que bien se puede hacer a un montón de acciones en nuestro comportamiento diario. Mientras tanto, ¿como quieres ver el vaso? ¿medio lleno o medio vació? Siempre habrá algo que se pueda mejorar y precisamente por eso no podemos dejar de intentarlo. Yo prefiero estar del lado de los que lo intenta. Saludos.

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