jueves, 13 de marzo de 2014

Al sol, bicicletas

Hoy toca una de hedonismo. Para los que vivimos en el lado oscuro, el sol invernal nos resulta doblemente reconfortante por escaso. Después de unos meses duros y unas últimas semanas borrascosas, por fin ha habido una tregua en las inclemencias y el sol lleva luciendo unos días seguidos y se ha hecho notar en la moral de la gente y en la ocupación de las calles.


La gente se ha echado a la calle con alegría inusitada, tratando de aprovechar el momento, el armisticio meteorológico, y, además de las habituales, las bicicletas ocasionales se han atrevido otra vez a salir con sus pasajeros a bordo, felices, nerviosos por haber perdido el hábito pero emocionados de su atrevimiento y de las sensaciones que reviven.

Después de la tormenta siempre sale el sol y con el sol llegan los caracoles y las bicicletas se multiplican.


Fotos: Adoquines y losetas.

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