Esto es lo que deben haber pensado Richard Moreta y su gente de Exterior Architecture para proponer un proyecto tan alucinante como el del SkyCycle, el BiciMetro elevado, protegido, aislado del peligroso tráfico del Londres que Boris Johnson quiere conquistar para la bici y que su propuesta de CicloSuperAutopistas no han conseguido ni por asomo pese a la tozudez de cada vez más londinenses obstinados en usar la bicicleta en esa ciudad, aunque sea pública. Nos lo explica un compañero suyo.
¿Y si hacemos circular a los ciclistas por las vías del tren rápido? ¿Esas que surcan la capital británica a la altura del segundo piso? Así nada ni nadie interrumpiría los tránsitos ciclistas por estos corredores exclusivos y excluyentes. ¡Bingo! Lo tenemos.
Una concepción futurista, descarada, flipante. Una visión que pone al ciclista a salvo a un precio realmente alto: el de su libertad. Genial idea para despachar a los ciclistas y confinarlos en corredores aislados, apartados como trenes de alta velocidad. Como gusanos.
Es un drama el que vivimos en una sociedad que, por no poder (o querer) condicionar el tráfico motorizado, es capaz de dar cobertura a este tipo de majaderías estratosféricas. Esperemos que Barclays no tenga dinero para financiar esta locura parafuturista.
La verdad a mi no me interesa este proyecto porque me gusta pasear por la ciudad. Llevo 8 años haciéndolo ( no es tanto ) Pero me siento todavía joven como ciclista urbano. El skycycle seria mi jubilación.
ResponderEliminarPero si cubriría las expectativas de seguridad que la mayoría de los ciclistas exigen. Yo no soy la mayoría. Se ve costoso el proyecto. No muy sustentable.
¿Expectativas de seguridad que la mayoría de ciclistas exigen? Más bien respondería al tipo de subhumano en el que mucha gente se ha convertido, que renuncia a su libertad y su autonomía.
EliminarA mi me gusta la idea como enlace. No forzar a los ciclistas a ir obligatoriamente por ahí, pero si como solución para desniveles acusados o puntos conflictivos de dificil resolución.
ResponderEliminarTambién, como decía antes, la renuncia a toda actividad física... ¿por qué no pedimos que un funcionario pedalee por nosotros?
Eliminarhttp://www.elmundo.es/elmundo/2012/09/12/natura/1347462336.html
ResponderEliminar"La propuesta ha pasado ya por la mesa del alcalde Boris Johnson, que la ha considerado como "interesante"."
Igual de interesante que meter a los ciclistas en la acera a discrección. Menudo elemento el alcaldete.
"Aunque aún no hay un coste estimado de la propuesta, el sistema lo financiarían en principio los propios ciclistas, que podrían hacer uso del carril elevado usando la tarjeta de transporte (Oyster)."
Por supuesto. Quién iba a pagar el dispendio si no. Las carreteras las pagan todos los londinenses. Este esperpento no.
"La idea la tuvo Sam Martin hace dos años, cuando dejó de usar la bicicleta en Londres por considerar que no era seguro. El aumento de los accidentes en el 2011, con 16 ciclistas muertos en las calles de la ciudad, ha disparado las alarmas."
Como dije en CiudadCiclista en su momento, 16 ciclistas muertos en un año son la excusa. Pues algo habrá que hacer con los peatones, porque en el mismo período murieron 77. Incluso disponiendo de sus vías elevadas y subterráneas.
Jo, que bien, es como el metro pero sin el metro.
ResponderEliminarCuanto majete suelto. A ver si vamos quitando coches, haciendo que el viaje en coche tenga que justificarse por una cuestión de necesidad y no de comodidad, y dejamos de chorrearnos con ralladas mentales.
Yo lo haria justamente al reves,todo el entramado de calles,señales, plazas de aparcamiento para vehicilos a motor fuera subterreneo, como el metro. Asi quedarian las ciudades divinas, solo para peatones, ciclistas y zonas verdes
ResponderEliminarMucho más fácil el devolver a las Personas, el espacio robado por coches aparcados 24h/365d. El uso de un automóvil, debe ser la excepción; nos ha aislado y deshumanizado las poblaciones
ResponderEliminarParece que los técnicos tienen que llegar a proponer este tipo de salvajadas para que los ciclistas nos demos cuenta de que llevamos demasiadas décadas defendiendo lo que determinados gurús del tecnicismo hacen "para nosotros", abandonando toda la naturalidad de la bicicleta en la ciudad. Estos grupos ciclistas han defendido ciegamente, y siguen haciéndolo, los intereses de estos técnicos y, cuando fallan, apoyan soluciones técnicas más sofisticadas para resolver las anomalías creadas, aún cuando les convierten en ratones de laboratorio o restringen la potencialidad de la bicicleta o limitan su libertad y autonomía. Incluso, como podemos ver, algunos considerarán esta invención técnica como el mayor avance para la seguridad definitiva de los ciclistas. Resultado del tipo de subhumano en el que se han convertido muchos de nuestros vecinos. Ya no queda ni rastro de sensatez.
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