Vivimos tiempos difíciles. Para muchos la situación es tan angustiosa que es comparable a un estado de excepción o un ambiente pre-bélico, un ambiente de guerra, financiera y económica pero guerra en definitiva. En este escenario donde la llamada a la austeridad se ha generalizado como única fórmula para afrontar las dificultades, el asunto energético cobra una preeminencia sobre otros.
Con una balanza energética altamente deficitaria, con una economía energéticamente dependiente, con un consumo energético disparatado y con un estilo de vida que no está poniendo en cuestión este tipo de desmanes, debería ser lógica una reacción responsable por parte de los estados dirigida a hacer reflexionar a la ciudadanía respecto a las consecuencias que todo esto tiene en el estrangulamiento de nuestros países.
Y así podrían tener sentido campañas de corte propagandístico dirigidas a controlar este despilfarro energético apelando a la conciencia colectiva. Igual que hicieron los estadounidenses en vísperas de la Segunda Guerra Mundial alertando a sus conciudadanos de que conducir sólos un coche suponía un derroche energético comparable a darle fuerza al enemigo.
Hoy el enemigo quizá no sea tan personalizable, pero hoy igualmente conducir un coche en solitario sin motivo justificado no deja de ser una forma de alimentar este monstruo que consume espacio y energía de una manera insaciable, este monstruo que se cobra más víctimas que muchas guerras y deja muertos y heridos a diario, este monstruo que atemoriza a todos en la calle, que intimida a los demás, este monstruo que además nos hace dependientes del poder de las corporaciones energéticas y de los grupos financieros que les dan cobertura.
Conducir un coche solo sin una justificación suficiente e inevitable, en este escenario, representa así una irresponsabilidad tremenda en una sociedad que necesita reorganizarse, pero representa además una tiranía respecto a las libertades de los demás y una forma de poner en compromiso su seguridad. Así pues, y aunque la imagen de Hitler quizá no represente estos valores, cabría reeditar este tipo de mensajes que llaman a compartir los viajes en coche. Pero también podrían reformularse en otros que incentivaran al uso de medios no motorizados, como la bicicleta.
Gracias a JuanCris Ortiz por la inspiración.
Gran artículo. Muchas gracias Eneko.
ResponderEliminarVeo que este artículo es muy FLOJO. El autor no debería quedarse en la expresión de lo que le "gustaría que ocurriese" y buscar las razones de porque pasa lo que pasa y porque no cambian las cosas hacia donde nos gustaría.
ResponderEliminarEn primer lugar, es de cajón que si desde la esfera política no hay casi ningún interés en promover una movilidad más sostenible (¿me puede alguien decir que fue de la ESTATEGIA ESPAÑOLA DE MOVILIDAD SOTENIBLE? firmada en 2009) es PORQUE NO INTERESA a los grandes poderes económicos, industriales y finacieros que existen en este país. Para ellos, cuanto mas se consuma (más gasolina, mas acero, mas cemento en infraestructuras y mas contaminación) pues muchísimo mejor, eso anima y compensa la caída del consumo interno, que anda decaído.
la movilidad sostenible no interesa y por eso, NO ES UNA POLITICA de ESTADO, como pueda serlo en otros países, por ejemplo, Reino Unido, donde si existen, desde agencias públicas y privadas relacionadas con este tema, un presupuesto acorde a las necesidades y, algo que también es importante, institutos de investigación y publicacion de estudios sobre estos temas que llegan a la opinión pública y a los políticos regionales y locales para que tomen decisiones menos chapuceras y mas argumentadas. Por aquí, de momento, lo que hay es un alarde de buenas intenciones, incluso con el casco obligatorio. y ya se sabe de que esta hecho el camino del infierno.....pues eso. Por lo demás, pues se agradece que existan BLogs como éste y eso es de agradecer a su autor.
Gracias por tu aportación Paco y gracias por lo de flojo, porque mucha gente considera que la línea de este blog es demasiado dura.
EliminarDe todas formas, no siempre se puede andar diciendo todo en literal:
http://bicicletasciudadesviajes.blogspot.com.es/2013/04/son-los-coches-estupidos.html
Un saludo