martes, 24 de abril de 2012

La bici: así de simple

Hoy la cosa ha tenido su intríngulis. Tocaba convencer a un curso de estudiantes de automoción de que la bici es más conveniente que el coche y que el oficio que estaban aprendiendo (estos eran de chapa y pintura) lo iban a tener que aprender muy bien porque, si todo salía de acuerdo con nuestros planes, la competencia se iba a poner muy dura. Difícil tarea sin duda. Para más inri, a las 3 de la tarde, justo después de comer y en un centro que, para acceder, hay que salvar una cuesta con rampas del 10%. Y, para rematarlo, después les enseñaríamos lo fácil que es la mecánica de mantenimiento de la bici. Tanto que cada uno se la podía hacer en su casa prácticamente sin herramienta y con unos conocimientos que se adquirían en una hora. ¿El marco? Un taller de mecánica del automóvil. ¿Surrealista? ¿Contradictorio? No. Simplemente un reto. A ello nos hemos dedicado toda la tarde.


¿Cuál es la principal virtud de la bicicleta?

Sin duda su sencillez. Sencillez de manejo, sencillez de desplazamientos, sencillez mecánica, sencillez de presupuestos, sencillez a la hora de relacionarse con los demás. La bici es sencilla. He ahí su potencial. Cualquiera puede hacerse con una bici. Cualquiera. Ese ha sido el centro de la argumentación y probablemente ese ha sido el éxito de la jornada.

Unos estudiantes que hacen todo un ciclo formativo durante varios años para comprender los entresijos de la complejidad mecánica de un automóvil son, probablemente, los que mejor pueden comprender y valorar la simplicidad de un vehículo como la bicicleta y a los que más puede sorprender su eficiencia basada en la fuerza humana, dos ruedas y unos mecanismos de palanca y transmisión realmente básicos, fundamentales.


El esfuerzo en este caso consiste más en saber llegar a un público que, de salida, se presentaba apático, adormecido y escéptico, por no decir desinteresado, que en tratar de darle la vuelta a los tópicos y ampliar la información disponible, muchas veces basada en arquetipos comerciales, en un modelo que premia el consumo, la apariencia y la posición social y donde la bicicleta todavía no ocupa el lugar que se merece.

No creo que ninguno de los participantes en los talleres de hoy vayan a cambiar sus hábitos de movilidad. Estos ya están maleados. Lo único que me parece interesante es aportarles información valiosa y argumentos de calidad que les sirvan, al menos, para darse cuenta de las consecuencias que tienen las decisiones que toman y las que van a tomar en el futuro a la hora de moverse y para poder valorar y respetar a los que hagan otras opciones y utilicen otros medios para desplazarse.

Así de simple.

2 comentarios:

  1. ¿Y una mención al peak-oil y a la reconversión de BH y Orbea de fabricantes de armas a fabricantes de bicicletas?. Por terminar de regar la semilla... y quien quiera entender que entienda.

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  2. Que interesante!, educativo y a la vez está la sensibilización. Estáis realizando una buena labor, con sentido y coherencia. No sois talibanes de la bicicleta, hay criterios y razón. Ánimo

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