Cuando un término es tan traído y tan llevado, tan manido, acaba perdiendo su significado original y acaba convirtiéndose en un lugar común sin contenido y sin intención claros. Hablar de Movilidad Sostenible (y mucho más con mayúsculas) es políticamente correcto. No se trata de cambiar nada sino más bien de aparentar que se está cambiando algo. Si no ¿por qué sólo se le dedica una Semana (aunque sea con mayúscula)? Para los asuntos que de verdad interesan se dedican años, décadas, siglos. No se mide el esfuerzo, ni se condiciona.Para hacer autovías, trenes de alta velocidad o redimensionar aeropuertos y multiplicar aparcamientos en impresionantes centros comerciales, empresariales o de ocio no se dedican Semanas ni miles de euros. Esta es la paradoja. ¿Creemos realmente en lo que hacemos o hacemos creer que es realidad lo que enseñamos? Pues probablemente ambas cosas.
Peatones, bicicletas y transporte público... ¡un mundo mejor! ¡Qué bonito! ¿Y cómo lo vamos a hacer en una semana, perdón, en Una Semana? Pues precisamente así: bonito. Como una flor.
¿Menos coches? De verdad ¿quién desea esto? No debe ser el mismo Quién que decide hacer todo lo contrario con los mejores fondos de estos pequeños quienes que se alegrarán una Semana creyendo que algo está cambiando simplemente porque es lo que les enseñan. Afortunados los inocentes...
¿Servirá realmente para cambiar las opciones de transporte de alguno de los que participen en cualquiera de los actos programados en ella? ¿Si? ¿Por qué? ¿Habrá alguna revelación determinante que abrirá los ojos de alguien? ¿Cuál? ¿Alguien descubrirá precisamente en esa Semana que lo que hace a diario no está bien y va a hacer algo diferente?
Marcha ciclista en Praga (Semana Europea de la Movilidad 2009)
Lo que rodea a la Semana de Movilidad es una cuestión de marketing verde ó fachada verde. Qué bonito, qué precioso... una semana realizando actos actividades de risa. En mi ciudad, Logroño, el año 2009 entre los multipleas actos estaban: exposición de coches de época, circuito de cars para niños, paseos en segways, reparto de timbres para bicis, reparto de pañuelos de fiestas en los autobuses (la semana coincide con las fiestas de San mateo, para mas gracia)... No me digais que no te partes de risa con estas actividades. Al día siguiente la gente dejó el coche y se fue andando, en bici o bus... que no, que es broma!!!
ResponderEliminarEn el asunto hay un bastante de gramática. ¿Qué es la sostenibilidad? ¿el adjetivo de "movilidad", "crecimiento", "desarrollo",...? Pues se le trata como tal: como a un adjetivo, sin sustancia. El día que la sostenibilidad sea el sustantivo, la pregunta será cómo hacer movible la sostenibilidad, o si se puede crecer desde el paradigma de la sostenibilidad, o qué tipo de desarrollo es compatible con la sostenibilidad.
ResponderEliminarEn otras palabras: aquí lo indiscutible es que hay que moverse (y a poder ser muchos y rápido), y la sostenibilidad viene a ser una tendencia, un deseo, una buena intención, pero siempre supeditada a lo indiscutible.