Pues estaba yo en esas cuando se me ha quedado grabada esta imagen:
Y me he dicho ¡fíjate tú! todo el año batallando para reducir la presencia del coche en tu entorno y luego, entre la parafernalia que decora tu propia casa, te vuelves a encontrar la simbología del automóvil en una postal navideña. En fin, hay que resignarse. Estamos en Navidad y no es cuestión de andar armándola por este tipo de memeces. Total la Navidad no deja de ser sinónimo de hipermovilidad y es donde el coche particular cobra un sentido en el "vuelve a casa vuelve..." Así pues, hagamos una excepción y mantengamos la concordia para conservar la paz y el entendimiento.
Pero,
¿Qué pasaría si le diéramos la vuelta?
El resultado ha sido realmente increíble:
Me he quedado impresionado. Este es mi deseo: ¿Seremos capaces de darle la vuelta al coche para poder vivir mejor? Yo ya he empezado a hacerlo y os puedo asegurar que las cosas me han cambiado mucho. A mejor.
Pasar una buena noche.
¡Ojalá! Y que siempre se convierta en esa gran sonrisa...
ResponderEliminarBuenísimooo!!
ResponderEliminarOkene! Zilef Dadivan!
ResponderEliminaroy yov a rad arto "atleuv la odnum laicepes" ne atelcicib.
agral adiv a extniaro y a extniarodunm,y us noinu acisif.
rotia,iar,okene,reki,alesig,asile...a sodot y sadot azreuf y sanag arap riuges odneicreje!