martes, 8 de noviembre de 2011

Visión nocturna

De noche las cosas se ven distintas. Hay algunas que no se ven y hay que tener cuidado con ellas. Pero hay otras que se ven, precisamente por eso, porque es de noche. El cambio de iluminación ofrece algunas imágenes que de día no se pueden ver.

Desde que nos han adelantado la noche, hay cosas que se iluminan y dejan ver al trasluz. Hoy he tenido esta visión y me ha parecido realmente significativa.


Hay casas que tienen este tipo de facilidades: cuartos de bicis. Accesibles, suficientemente grandes, junto a la puerta, en la planta baja, un lugar donde guardar la bicicleta en casa es fácil y seguro. Esencial. Primordial. Poco se habla de este tema cuando se plantean prioridades en la promoción del uso de la bicicleta y, sin embargo, resulta uno de los aspectos cruciales. Uno de los motivos por los que la mayoría de la gente no se anima a usar la bicicleta como vehículo utilitario es precisamente este: la dificultad para guardar la bicicleta en casa.

Es clave afrontar este problema que es mucho más importante y mucho más generalizado de lo que la mayoría de impulsores de la bicicleta piensa y es uno de los factores más disuasorios de su uso. Si guardar la bici en casa se convierte en una penitencia para el usuario o en una molestia para los demás, al final, se buscarán alternativas más cómodas, más rápidas y menos engorrosas.

Y es precisamente durante la noche cuando se perpetran la mayor parte de robos y vandalismos en la calle y cuando se puede ver dónde y cómo "duermen" las bicis en la ciudad.

2 comentarios:

  1. Me encantaría tener un lugar en la portería del edificio para poder dejar la bici con seguridad y no tener que subir y bajarla cada día (3 pisos y sin ascensor). Bueno, al menos tengo sitio en casa para ella y no tiene que dormir en la calle, poco duraría.

    ResponderEliminar
  2. hola, aquí @clarablanchar, del diario El País y del blog http://blogs.elpais.com/mamas-papas/
    Preparo un post sobre circular con niños, y me gustaría contactar contigo para comentar tu entrada de septiembre. cblanchar@elpais.es gracias

    ResponderEliminar