Ilustración de Andy Singer gracias a Stef Orzan |
No sería nada espacialmente grave si no fueran tan habituales, tan repetitivas, tan rutinarias, tan masivas, tan irracionales y estuvieran sustentadas por tantos intereses inmovilistas y desmovilizadores. No pasaría nada si no fueran la causa de algunos de los males más graves que aqueja nuestra sociedad, si no generaran unas inercias tan abrasivas, si no entrañaran toda una serie de perversiones y perjuicios que se presentan como privilegios y ventajas. No pasaría nada si no fueran tan potentes... y tan despotenciadoras.
Coche, ordenador y televisión. Tres silloncitos que nos hacen sentirnos poderosos, invulnerables. Tres peligrosos silloncitos que fomentan la pasividad, el aislamiento. Tres silloncitos que nos acomodan y nos hacen acomodaticios.
¿Sillón o sillín? Tú elijes, tú decides.
Sillín, mil veces, sillín.
ResponderEliminar